05 marzo 2013

FUERZA INSTINTIVA.

Las conductas instintivas son autoreforzantes, es decir, el mero hecho de realizarlas ya supone un premio para el animal digamos que por si mismas se retroalimentan, inatas ya que vienen dadas en el genoma del individuo sin haberlas aprendido, los esfuerzos por prevenirlas muchas veces van ligados a establecer un equilibrio en sociedad:

  • Si no hubiera tráfico, no me importaria que mi perro corriera tres manzanas sin correa.
  • Si no tuviera vecinos, no me importaria la hora del dia en que ladra.
  • Si no existiera el veterinario, no debería aguantar a ese macho enfrente su turno para consulta.
  • Si no se relacionará con personas, no importaria que subiera las patas al cuerpo al saludar.

Pero vivimos en sociedad modificar este tipo de conductas implica una tensión entre el instinto animal y las normas de convivencia en una sociedad moderna, cada día más exigente, mantener la paz es fundamental y los dueños lo sabemos. Es una fuerza fuerte, ¿realmente podemos parar un rio con una mano? conozcamos mejor la estructura de este tipo de conductas en las que podemos diferenciar dos partes:

  • Impulso fuerza interna que empuja al perro a la manifestación externa de una conducta.

  • La meta (objetivo) fuerza externa que tira de él hasta recibirlo, es lo que el perro ansia en su expectativa.

El instinto nos invade a todos como organismos vivos cuando lo percibimos, y también tiene una finalidad adaptativa cuando lo satisfacemos.

Son muchos los impulsos instintivos que nuestro perro puede mostrar unos están más potenciados en algunas razas y otras sin embargo conviven con nosotros de manera latente, algunos de estos pueden ser:

Impuso de caza, huida, cooperativo, defensa, sexual, cobro, guarda...

Debemos actuar contra natura premiar siempre todos aquellos comportamientos válidos que sean una alternativa a la conducta instintiva no potenciada, si no lo refuerzas siempre puede que vuelvan a resurgir por su condición natural,  debido a su intervalo de auto-refuerzo continuo.

Este tipo de conductas suelen ser de alto gasto energético para perro, puesto que se entrega al 100 % de su rendimiento, sin medir su desgaste físico y mental,  hay animales jovenes que pueden acabar asociando este hecho a su relación con la actividad. No desgastes a tu perro demasiado, se consciente de su agotamiento para interrumpir la actividad si fuera preciso, algunos síntomas pueden ser falta de atención, velocidad o desorientación. Si todo va bien disfruta persiguiendo unos patos ya se encargarán ellos de huir gracias naturalmente a una conducta instintiva.