Con un aspecto un tanto aristocrático, el Basenji, un perro equilibrado, animado, inteligente presenta una constitución liviana y huesos delgados así como largas extremidades en relación con la longitud del cuerpo. En su conjunto este perro, bien proporcionado, tiene la gracilidad de una gacela.
El Basenji no ladra, aunque ello no significa que sea mudo, ya que de hecho emite una especie de risa y canto tirolés, muy característico. Este perro, extremadamente limpio, es inteligente, independiente, cariñoso y activo aunque con los extraños puede mostrarse algo distante.
Originario de la República del Congo, necesita un cepillado medio y es apto para los niños.
El Basenji tiene una cola muy característica, que se enrosca por encima de la espalda, pegándose contra el muslo, formando uno o dos bucles.
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